Las numerosas bajas entre miembros de la cúpula de al Qaeda, junto con su aislamiento en las áreas tribales de Pakistán han llevado a una importante disminución en las capacidades operativas del núcleo original de la organización. Sin embargo, organizaciones e individuos con similar ideología y poca o ninguna relación con al Qaeda, aunque amparándose en su nombre, continúan activos en diversas áreas del mundo.