CONSECUENCIAS DEL DESCENSO DE LOS PRECIOS PETROLÍFEROS

Oportunidades para España dentro de sus principales suministradores

Alcance del análisis

Desde principios del siglo XXI el precio del petróleo ha experimentado una escalada sin precedentes. Tras una ligera decaída en el 2009 – consecuencia de la crisis financiera – los precios del crudo se recuperaron rápidamente, llegando incluso a superar los precios anteriores. Arrastrando las consecuencias de esta crisis financiera, la demanda de crudo se vió paralizada a mediados del pasado 2014, provocando una caída continuada del precio del barril, sólo apreciando una leve recuperación en febrero de 2015.
Entendiendo que esta situación será crítica para los países productores y exportadores de petróleo, este monográfico multimedia analiza los diez principales suministradores de petróleo de España y determina qué oportunidades se presentan más allá del ahorro económico en su importación.

Conclusiones

 

Si bien es cierto que desde el punto de vista del importador, los precios bajos del producto importado son una buena noticia, diferente perspectiva acostumbra a tener el exportador, y más cuando el producto exportado es su principal sustento. Cuando un país depende principalmente de una única fuente de ingresos, acostumbra a ser más un inconveniente que una ventaja. Si encima esta única fuente es el petróleo, producto codiciado por todos los países del mundo, con un precio sujeto a una alta volatilidad y, como recurso natural que es, extinguible, el inconveniente de depender solamente de esta fuente de ingresos se agrava aún más.

La mayoría de los países analizados en este monográfico tienen una gran dependencia económica del petróleo – la aportación del sector al PIB no baja del 15%. Esta dependencia,  sumada a la baja cotización actual de este producto, pone a la mayoría de éstos países en una posición crítica. Una de las principales salidas a esta situación es la diversificación de la economía, es decir, aumentar la aportación al PIB de los sectores no relacionados con el petróleo y, por tanto, reducir las del sector petrolífero. Al mismo tiempo, una diversificación de la economía suele presentar oportunidades para inversiones extranjeras.

África: 

De los cuatro países analizados, Nigeria y Angola son los que más opciones de diversificación presentan, seguidos por Argelia y Libia, siendo este último un país casi en estado fallido donde antes se deben arreglar otros asuntos estructurales.

América Latina:

Debido al historial de relaciones entre México y España, se puede considerar este país como una fuente consolidada de oportunidades así como de inversiones. Colombia por otro lado presenta numerosas opciones y, a diferencia de México donde ya se está consolidado, puede ser un nuevo mercado a explotar. Finalmente, Venezuela presenta muchos factores que la apartan de una situación de oportunidades, al igual que Libia, fruto de importantes carencias estructurales.

Oriente Medio:

Arabia Saudí es el país menos afectado por la presente caída de los precios del crudo, debido a los grandes márgenes que tiene en esta industria y su solvencia macroeconómica. No obstante, puede ser un cliente importante a nivel comercial por sus altos índices de importación.

Iraq presenta las mismas condiciones que Libia o Venezuela y no se considera un nicho de oportunidades a explotar.

Rusia:

Rusia podría considerarse la economía más desarrollada de todas las analizadas, aunque también precise una diversificación de su economía, su tendencia al proteccionismo y paternalismo a las grandes empresas hace difícil la presencia de capital extranjero en busca de oportunidades.

Key Judgments

Key Judgement 1

Ocho de los diez países analizados se verán especialmente afectados por la caída de los precios petrolíferos pues la aportación de este sector al PIB es de acusada importancia – entre el 15 y 80 por ciento -. Lo más probable es que una reducción de los ingresos a las arcas de estos países suponga una amenaza crítica para los mismos a corto y medio plazo.

Key Judgement 2 

La más que probable situación de crisis a la que se enfrentarán estos países también puede suponer una oportunidad para los mismos, pues dará pie a la diversificación de la economía. Esta misma diversificación también puede representar un nicho de oportunidades para España.

Key Judgement 3

De los países estudiados, los que más oportunidades presentan son Nigeria, Angola y Colombia en sectores de infraestructuras, telecomunicaciones y construcción en el propio país. Por otro lado Arabia Saudí presenta oportunidades a nivel comercial derivado de sus altos índices de importación.

Key Judgement 4

Es poco probable que Libia, Iraq y Venezuela presenten oportunidades pues la inestabilidad política que sufren los convierte en países casi fallidos. Rusia tampoco se presenta como un candidato, pero a diferencia de los países anteriores, las causa de su falta de oportunidades se centra en un paternalismo y proteccionismo del estado hacia sus empresas más potentes. 

Key Judgement 5

Este análisis no ha tenido en cuenta el resultado de las elecciones en Nigeria celebradas el pasado 28 de marzo,  en las que por primera vez ganó el partido de la oposición desde la recuperación de la democracia en 1999, instaurando Muhammadu Buhari como nuevo presidente del país. Tampoco tiene en cuenta los recientes conflictos diplomáticos entre España y Venezuela a consecuencia de la detención de personalidades de la oposición en este último país. No obstante, las más que probables consecuencias de estos dos sucesos tendrán que ser contempladas en futuros análisis.

Contextualización

Para poder entender un poco más la idiosincrasia del petróleo a continuación se presentan dos elementos que aportan un poco más de luz a este mercado. El primero consiste en una recopilación de sucesos desde 1859 hasta la actualidad que han afectado los precios del petróleo. Los momentos anteriormente detallados tuvieron un impacto directo en el precio del petróleo, la gráfica que se muestra a continuación muestra la evolución de los precios del petróleo a raíz de la historia.

Videobriefing

ePaper

En 2014 España importó petróleo de 26 países diferentes. Para el presente análisis se han seleccionado los diez principales, por volumen de importación: Nigeria, México, Rusia, Arabia Saudí, Angola, Colombia, Venezuela, Argelia, Iraq y Libia. El mapa presentado a continuación muestra información referente a:

  • Miles de toneladas de crudo importado por España.
  • Porcentaje del total de las importaciones.

Un primer hecho que tienen en común estos diez principales suministradores es su dependencia económica al petróleo – la aportación de este sector al PIB del país no es inferior al 15% en ninguno de ellos. Por tanto, la actual bajada de los precios les ha puesto en una situación complicada y en aquellos donde porcentaje es más elevado la situación puede llegar a ser crítica. Por el contrario, una situación complicada o crítica no debe tener solamente connotaciones negativas sino que también puede ser fuente de oportunidades tanto internas como externas.

El presente análisis precisamente pretende esto último: encontrar oportunidades fuera del sector petrolífero en aquellos países en los que ya existe una relación comercial importante en ese sector. A tal fin se ha analizado información macroeconómica de cada uno de los implicados, así como otras fuentes que pudieran aportar conocimiento sobre los sectores con más potencial. No obstante, la búsqueda de oportunidades no se centra solamente en buscar sectores con potencial, sino que también considera las amenazas que se presentan con el fin de evaluar si lo que a priori  parece una oportunidad, a posteriori  puede acabar convirtiéndose en una desventaja y/o riesgo.

 

Metodología

Para efectuar el análisis, cada analista se ha centrado en dos países y ha extraído sus propias conclusiones, tanto en oportunidades como amenazas. Con el fin de poder ampliar las opiniones y poder dar un producto objetivo, estas mismas conclusiones han sido compartidas con el resto del grupo que han hecho las aportaciones correspondientes, ya sea añadiendo nuevos sectores de oportunidades o amenazas a los mismos. Seguidamente, el analista del país ha recogido los comentarios y contrastado a fin de poder dar respuesta. El último paso el método de análisis ha consistido en consensuar los resultados para poder presentarlos en su conjunto. Con el objetivo de facilitar la lectura de los diferentes informes, estos se han clasificado en función del continente o región a la que pertenecen. Así pues, el infome se estructura de la siguiente manera:

  • África: Angola, Argelia, Libia y Nigeria.
  • América Latina: Colombia, México y Venezuela.
  • Oriente Medio: Arabia Saudí e Irak.
  • Eurasia: Rusia.

A continuación se presenta un cuadro, síntesis de los principales indicadores referentes a los países del continente africano.

Angola:

Tras el fin de la guerra civil en 2012, Angola ha disfrutado de más de una década de fuerte crecimiento en la cual el petróleo ha jugado un papel fundamental, ya que aporta casi la mitad de su PIB, el 80% de su recaudación fiscal y el 95% de las exportaciones. Esta pronunciada caída de la cotización del crudo ha supuesto un gran perjuicio a su economía. No obstante, Angola registra un saldo por cuenta corriente positivo, también posee un nivel de reservas razonable y, en principio, podría contar con el apoyo del FMI y otros actores internacionales en caso de que atravesara problemas de liquidez a corto plazo. A comienzos de año, el gobierno tomó como medida de emergencia un reajuste de su presupuesto anual para adaptarlo a la coyuntura actual, asegurando la solvencia del país con un precio por barril situado en torno a los  40 dólares.

Argelia: La economía argelina se encuentra dominada por los sectores del petróleo y del gas que, juntos, aportan cerca de la mitad del PIB, tres cuartas partes de los ingresos fiscales y prácticamente la totalidad de sus exportaciones. No obstante, las autoridades argelinas no se sienten preocupadas por la situación actual de los precios del crudo, dado que sus cifras macroeconómicas son relativamente favorables. El gobierno ha aplicado una política de limitación del endeudamiento externo y acumulación de reservas que ha dado sus frutos: hoy disponen de reservas de divisas por casi tres años de importaciones y una deuda externa que no llega al 2% del PIB. Por tanto, mantienen una posición exterior cómoda, que reduce las dudas sobre la solvencia del país incluso en caso de caídas importantes y de larga duración de los precios de los hidrocarburos.

Libia:

Los hidrocarburos aportan el 80% al PIB y la práctica totalidad de los ingresos públicos (99%) y externos siendo un 95% de las exportaciones totales. Por tanto, la recuperación de la producción en julio y agosto ha sido fundamental: en septiembre la oferta ha llegado a los 900.000 b/d, muy por encima de los 220.000 b/d que se promediaron a principios de 2014, aunque aún por debajo de los 1,78 mill. de b/d que producía el país antes del estallido de la primavera árabe. En el caso de Libia, el problema principal no se encuentra en la evolución de los precios del crudo, sino en la inestabilidad política que, entre otros efectos, ha sido la causante de los bloqueos recurrentes en la producción de hidrocarburos desde 2011. A pesar de la reciente tendencia alcista de la producción, la situación queda lejos de estar solucionada, y no son descartables nuevos hundimientos de la extracción de crudo en un futuro próximo.

Nigeria:

En sector petrolero es de enorme importancia para Nigeria: aporta el 15% del PIB, el 59% de la exportación y el 75% de los ingresos fiscales. Nigeria es el 5º mayor exportador del mundo, y cuenta con unas reservas probadas equivalentes a 40 años de producción al ritmo actual. La caída del precio del barril dañaría el potencial de crecimiento, y empeoraría el estado de las cuentas públicas y exteriores, que hoy son relativamente razonables. No obstante, con una deuda externa muy reducida, un nivel cómodo de reservas equivalente a casi 7 meses de importaciones y una actitud hacia la diversificación de la economía para no depender tanto de petróleo, Nigeria cuenta con una buena capacidad para hacer frente a caídas del precio del barril, aunque las dificultades se irían incrementando si los precios se mantuvieran en niveles bajos durante un periodo largo de tiempo.

 

A continuación se presenta un cuadro resumen de los principales indicadores referentes a los países de la zona africana.

Colombia: La economía de Colombia podría sufrir a largo plazo si el precio del crudo sufriera una bajada importante y sostenida en el tiempo. La aportación de la industria petrolífera al PIB del país es de un 8%, por lo que esta industria ha cobrado importancia en los últimos años y con ello la preocupación sobre su desempeño futuro, no solo por su aporte a la satisfacción de necesidades energéticas de la sociedad sino por su contribución a la economía colombiana en general. No obstante, no se puede considerar la economía colombiana como una economía petrolera. La caída de los precios del crudo podría afectar al país en términos de ingresos fiscales y exteriores. Sin embargo, Colombia cuenta con un modelo económico suficientemente diversificado para defenderse de éstas bajadas de precios.

México: Constituyendo el petróleo el 7% de PIB del país, aporta cerca del 30% de los ingresos del Estado, con lo que el déficit público se resiente cuando baja la cotización del crudo. No obstante, el gobierno responde anualmente a la caída del precio del barril a través del mercado de futuros, suavizando de este modo el impacto durante los primeros meses. Por otro lado, la petrolera estatal PEMEX mostró una tendencia al declive de la producción durante la última década, debido en parte a la legislación. Como respuesta, se impulsó un nuevo marco legislativo (Reforma energética) dirigido a revitalizar la extracción de petróleo y a reducir la su dependencia fiscal. Con ello se espera un incremento moderado de la producción cuyos efectos se visualizarán a medio y largo plazo. No obstante, si a corto plazo la cotización del crudo se mantiene en niveles reducidos, el gobierno se verá obligado a ajustar sus cuentas para evitar incrementos del déficit público.

Venezuela: El petróleo aporta un cuarto del PIB, el 90% de las exportaciones y más de la mitad de los ingresos públicos. Por lo tanto, una caída permanente del precio del petróleo pondría en aún mayores aprietos al gobierno venezolano. El país sufre de un nivel de inflación del 60%, un déficit público disparado, escasez de productos de todo tipo y fuertes distorsiones en el funcionamiento de la economía. Se estima que el gobierno necesitaría un precio medio anual del barril de 161 $ para equilibrar su presupuesto. No obstante, Venezuela no sufre de déficit por cuenta corriente gracias en primer lugar a la enorme riqueza petrolera que, a pesar de la mala gestión, sigue aportando unos 85.000 mill.$ anuales en ventas internacionales de crudo. Además, las compras al exterior se han visto limitadas por las dificultades de financiación que sufre el país, y por el establecimiento de un sistema administrativo que dificulta la importación a costa de ahogar las compras al exterior y la actividad económica.

A continuación se presenta un cuadro resumen de los principales indicadores referentes a los países de la zona oriente medio.

   Arabia Saudí: Es la nación con mayor capacidad de producción de petróleo del mundo, situándose en el primer puesto del ranquin mundial, y disponiendo, a su vez, de las mayores reservas de crudo (un cuarto del total mundial). El petróleo supone un 45% del PIB, el 90% de la exportación y prácticamente la totalidad de los ingresos públicos. Los saudís gozan de tal riqueza petrolera y de unos márgenes fiscales y exteriores tan amplios que la caída de precios no es una amenaza para su economía. De hecho, una de las principales barreras a una mayor bajada de los precios es la capacidad que tienen los saudíes de manejar su producción sin que esto ponga en riesgo su solvencia. Si el precio cayera muy por debajo del nivel necesario para la obtención de superávit durante un periodo largo de tiempo, los saudíes tendrían la capacidad de intentar elevar el precio recortando su propia producción. Por otro lado, en caso de incurrir en déficit por cuenta corriente, tampoco tendrían problema en encontrar financiación externa, contando durante todo el proceso con un colchón de reservas equivalente a tres años de importaciones.   Iraq: El petróleo aporta un poco menos de la mitad del PIB, casi la totalidad de las exportaciones y la inmensa mayoría de los ingresos públicos. La caída del precio, si se mantiene en el tiempo, debilitará aún más a la economía del país y a sus instituciones, ya de por sí extremadamente frágiles. No obstante, la caída del precio del barril no es el peor problema al que se enfrenta el gobierno. Bagdad ha perdido el control del norte de Iraq a causa de una guerra civil que involucra al ejército iraquí, a las milicias kurdas y al grupo armado ISIS. De hecho, parte de los campos petroleros iraquíes son explotados por los kurdos, que lo exportan por su cuenta. También hay pozos en manos de ISIS que les permiten producir y vender en el mercado negro entre 25.000 y 40.000 b/d. En definitiva, la situación es extremadamente delicada, y la caída del precio del barril es sólo un añadido más dentro de la problemática que sufre el país.

 

 

A continuación se presenta un cuadro resumen de los principales indicadores referentes a los países de la zona euroasiática.

 Rusia: Aproximadamente un 52% de los ingresos públicos y un 70% de los ingresos exteriores provienen de los hidrocarburos. Se estima que la caída del precio de los hidrocarburos, si se mantiene, podría recortar los ingresos externos en una cantidad equivalente a un 2% del PIB. Por lo tanto, una caída de su precio es un reto para la economía rusa que, además, previamente ya se estaba desacelerando. Las autoridades rusas cuentan no obstante con margen para amortiguar una caída de los precios en el corto y medio plazo. Entre otras cosas, las reservas de divisas son muy importantes, casi 10 meses de importaciones. La caída de los precios del petróleo se suma a las sanciones de la UE y EEUU por el conflicto en Ucrania. Se espera que las sanciones afecten hasta a un 20% de la producción de crudo rusa.

 

 

A CORTO-MEDIO PLAZO

Lo que se presenta a continuación es un pequeño análisis a futuro a partir de todo el conocimiento que ha ido adquiriendo cada uno de los componentes del grupo respeto a los dos países que ha estudiado en profundidad.  

ANGOLA

Después de 27 años de guerra civil que finalizó en 2002, sólo durante los últimos 13 años Angola está disfrutando de una cierta estabilidad bajo un gobierno socialista en el que su presidente, José Eduardo dos Santos lleva en el cargo des de 1979. Los retos a los que se enfrenta la tercera economía de África no son pocos ni sencillos, pues más de un quarto de siglo de guerra ha dejado el país con una gran deficiencia en infraestructuras, una sociedad poco formada, desastres medioambientales de compleja solución y una larga sombra de corrupción. A todo eso se debe añadir que los actuales precios del petróleo están añadiendo una dificultad más a un gobierno que depende del crudo para llenar casi la mitad de las arcas públicas. La diversificación de la economía se ve como una salida a esta situación de estancamiento: rebajar la dependencia del crudo aumentado las aportaciones de otros sectores permitiría al país obtener otras fuentes de ingresos y no estar siempre sujetos a la maldición del petróleo. Mejorar las infraestructuras conllevará una ampliación del mercado nacional más allá de los núcleos más poblados al igual que la construcción de presas para la generación de electricidad hidráulica, a medio plazo, se prevé la instalación de un cable de fibra óptica que conecte el hemisferio sur que podría convertir Angola en un núcleo de comercio y comunicaciones en el continente africano. No obstante, habrá que ver como va evolucionando el país a cada una de las mejoras y, en el momento que llegue, como será la sucesión en la presidencia y cómo encarará la transformación del país.

ARGELIA

El principal reto al que se enfrenta Argelia en estos momentos es el de la sucesión de su presidente, Abdelaziz Bouteflika, que ha gobernado el país de forma autoritaria durante los últimos 15 años, pero que ahora sufre un estado avanzado de cáncer. En función de si el relevo gubernamental es continuista o bien transformador , se podrán ver reacciones y cambios en las políticas económicas del país que le lleven a una mayor aceptación del sector privado y a una mejor gestión de las arcas públicas.

ARABIA SAUDÍ

Casi con toda seguridad Arabia Saudí es el país más estable por lo que a la producción de petróleo se refiere. Aún teniendo una economía muy dependiente del petróleo, sus grandes reservas, tanto de crudo como monetarias, así como la flexibilidad de la producción le permiten gestionar la crisis actual de los precios mejor que cualquier otro país analizado. No obstante, lo que a nivel interno es una gran ventaja, a nivel externo podría ser causa de conflicto. La decisión de la OPEP a mediados de noviembre de no bajar los niveles de producción, con el consecuente sobre-stock de producto y propiciando un mayor descenso de los precios, ha generado una división de opiniones en el sí de la organización entre los países que más les está afectado los actuales precios y aquellos que los pueden soportar mejor, dicho de otra forma, entre los países de la Península Arábiga y el resto de países africanos, sur americanos y del Oriente Medio. Especial interés tendrán las próximas decisiones que salgan de la Organización de Países Exportadores de Petróleo, donde si hasta ahora Arabia Saudí tenía un poder de decisión claro sobre el resto, ahora es posible que salgan nuevas voces, conflictos, divisiones y más aún, cuando la presidenta de la organización es de procedencia Nigeriana. Posible reunión de emergencia de la OPEP en junio 

COLOMBIA

Durante la última década Colombia se ha ido estabilizando principalmente gracias a las políticas económicas llevadas a cabo y a la gestión del conflicto con las FARC, que a finales de 2012 anunciaron un alto al fuego unilateral. Cabe esperar que en el futuro el gobierno colombiano haga ciertas concesiones a fin de pacificar el país como por ejemplo amnistías a guerrilleros, asumiendo también el coste político que esto puede suponer. A nivel económico no se esperan demasiados cambios, pues no parece apropiado cambiar las políticas que han tenido éxito durante los últimos diez años. 

IRAK, LIBIA Y VENEZUELA

Estos tres países se analizan en conjunto pues son los que menos oportunidades presentan y a la vez también son los más próximos a un estado fallido. Las tensiones diplomáticas de Venezuela con EEUU y recientemente con España no han hecho más que empeorar la imagen del país, también son destacables sus graves problemas económicos y políticos internos que paulatinamente van medrando el atractivo del país. Los problemas de seguridad y estabilidad en Irak y Libia deberán observarse y tratarse con mucha cautela tanto en el presente como en el futuro, sobretodo por la capacidad desestabilizadora de los actos violentos que se están llevando a cabo en la zona y que pueden extenderse aún más al otro lado del mediterráneo. La lucha contra el Estado Islámico y sus otros grupos afiliados, pulir las diferencias políticas y promover una activación económica son las claves para asegurar tranquilidad en esta zona.

MÉXICO

El cambio de tendencia que ha sufrido la industria petrolera en México estos últimos años, en los que la inversión requerida para la extracción y producción de petróleo era mayor que la rentabilidad del mismo, ha llevado a hacer reformas legales profundas, la principal de ellas lleva por nombre Reforma Energética. Uno de los puntos claves de esta reforma es que se permite la entrada de capital extranjero para la exploración y extracción de crudo y que recibirá su compensación una vez el país haya vendido el producto. Es probable que esta nueva situación, aún lejos de ser ideal, atraiga inversiones extranjeras y por tanto aumente la capacidad productiva y de exportación del país, es más que posible que en el futuro, la aportación de la industria petrolífera al PIB vaya aumentado paulatinamente, sin por eso repercutir en una mayor dependencia del país hacia ese sector. Según el FMI, se espera que México supere a España en el ránking de las economías mundiales. México supera a España como la primera economía hispana

NIGERIA

En las pasadas elecciones del 28 de marzo el pueblo nigeriano decidió cambiar de líder y poner al socialista y musulmán Muhammadu Buhari al frente de su gobierno. Destacar estos dos adjetivos pues el presidente saliente, Goodluck Jonathan es cristiano y de ideas liberales. El escenario que se presenta en Nigeria para esta siguiente legislatura muestra una serie de incógnitas fruto de este cambio de mentalidad en el poder. Por ejemplo, el gobierno del PDP (People’s Democratic Party) de Goodluck ha intentado durante añoseliminar el subsidio de los combustibles, en cambio ahora es muy probable que Buhari lo intente mantener el máximo tiempo posible aún contradiciendo todas las recomendaciones al respecto. El cambio de líder también supondrá una más que probable situación incómoda en el sur del país, territorio más cercano al PDP y donde se encuentra la industria petrolífera, pues una de las promesas electorales de Buhari era una redistribución de la riqueza del sur hacia el norte, zona del país menos desarrollada económicamente, azotada por Boko Haram y generalmente feudo del APC (All Parties Congress), partido de Buhari. Finalmente, en la lucha contra el terrorismo y principalmente contra Boko Haram, no se esperan cambios respeto la política anterior.

RUSIA

No se prevén cambios a corto-medio plazo en las políticas proteccionistas y paternalistas del gobierno ruso hacia sus empresas estratégicamente más importantes y menos aún con la situación tan delicada a la que se enfrenta con el actual nivel de los precios del petróleo. El alto al fuego declarado en Ucrania el pasado febrero parece mantenerse y esto debería tener implicaciones sobre las sanciones impuestas por la comunidad internacional. Aunque por el momento parece que las sanciones no han sido determinantes del todo para cambiar la política rusa en el conflicto, sí que están teniendo cierto efecto en la economía del país, que en caso de mantenerse o ampliarse sí que provocarían efectos adversos y probablemente una toma de decisiones más drásticas.